Mientras tanto
La vida de cada uno de nosotros transcurre entre las experiencias cotidianas que se nos presentan a los argentinos y una realidad escandalosamente perversa de coimas, amenazas, de injusticia y de todos los colores ocres de la desigualdad, de la ignorancia y el desinterés por todo lo que signifique la trascendencia de la vida en mayúsculas.