Carta a Milei, el presidente más incapaz de la historia democrática de Argentina

28.03.2025

Presidente Javier Milei:

Recalifico ante todo la imagen que pretendieron imponer sus miles de trolls financiados con fondos públicos. Usted no queda representado ni remotamentre por la imagen de un león africano. Con todo respeto, apenas alcanza a ser un león de felpa.

El pueblo marcha hoy en todo el país. Son adultos. Son jubilados. Son trabajadoras y trabajadores. Son familias con niñas, niños y bebés. Se expresan caminando, cantando y bailando. Se expresan con los gritos silenciosos de una rica literatura popular y callejera.

Lea sus carteles.

Se lo acusa de autócrata. De dictador en contexto democrático donde golpea con Decretos de Necesidad y Urgencia. De entregador de la soberanía. De abrir el país a corporaciones que han hecho desastres en otras naciones. Piden que renuncie.

Usted es responsable de la primera mentirocracia a gran escala de Argentina. De la primera nepotocracia que tiene a su hermana Karina Milei como copresidenta sin papeles. De la primera y burlesca perrocracia de América Latina.

Es el primer presidente en ser percibido dentro de Argentina, y a nivel internacional, como protagonista necesario de una estafa con moneda virtual.

Es el primer presidente argentino que reduce sus viajes al exterior por temor a ser requerido judicialmente en otros países como partícipe de la estafa $Libra. No quiere seguir la suerte de Augusto Pïnochet, responsable de genocidio en Chile, que la Justicia del Reino Unido detuvo por acciones judiciales iniciadas en España.

Presidente Milei, mire la manifestación de un pueblo por las pantallas de televisión. Por televisión, porque sabe que no podría caminar sin recibir masivos insultos contra usted. Contra su incapaz Ministra de Seguridad. Contra su impresentable Ministro de Economía.

Observe detenidamente cómo se manifiesta el pueblo en el día de la Memoria. Asómbrese ante tantas multitudes en tantos lugares. Aunque haya prohibido los drones en Plaza de Mayo y Casa Rosada, los miles y miles de manifestantes se observan igual. Se escuchan igual.

Observe detenidamente como la gente se expresa libremente y sin temor en cada ciudad, cada plaza, cada ventana, cada balcon.

Usted solo puede aspirar a ser el protagonista de un balcón de Casa Rosada, gesticulando, teatralmente ante una plaza vacía.

Plaza vacía de un gobierno vacío.

Fueron 30.000

Raúl Montenegro